Implementado de manera preventiva y por etapas, el Sistema de Seguridad y Salud Ocupacional podrá prevenir enfermedades de trabajo, sin ser una carga tan súbita para la empresa.
Hacer consciente al personal sobre los riesgos a los que se expone por motivo de su trabajo es una tarea que si se emprende entre todos puede ayudar a prevenir enfermedades de trabajo.
En México, durante el año 2020, se contabilizaron un total de 8 mil 274 incapacidades permanentes por enfermedades de trabajo, de las cuales las más frecuentes fueron: dorsopatías, hipoacusias y deumoconiosis.
Entonces, ¿qué podemos hacer para que las condiciones de trabajo no sean el origen de alguna enfermedad?
Sin duda, la participación activa de todo el personal es una de las claves para disminuir las enfermedades de trabajo.
Para ello se enumeran algunas actividades que nos pueden ayudar a mejorar la seguridad en nuestros centros de trabajo.
Conocer el proceso a nivel macro para prevenir enfermedades de trabajo
Realice un análisis sobre las entradas y salidas que tiene su empresa. Puede comenzar realizando un listado de las áreas con las que cuenta, así como la maquinaria, equipo y sustancias químicas que intervienen en cada una de ellas. No olvide incluir los riesgos que detecta en cada área.
Identificar qué normatividad aplica al centro de trabajo
Para ello puede generar un Diagnóstico de Seguridad y Salud en el Trabajo, el cual ayudará a observar sus fortalezas y puntos de mejora en materia de Seguridad e Higiene laboral.
Realizar exámenes médicos periódicos al personal en riesgo
Conocer el estado de salud inicial, y de manera periódica, de nuestros colaboradores que realizan actividades riesgosas (expuestos a carga, químicos, ruido etc.) es la base para evitar que se detone una enfermedad de trabajo. Tenga presente que lo que no se mide, no se controla.
Capacitar a sus trabajadores para prevenir enfermedades de trabajo
Inferir que el trabajador tiene el conocimiento suficiente sobre la manera segura de realizar sus labores es el peor error que podemos cometer. Recuerde que los vicios se pasan de generación en generación, por tal motivo es necesario capacitar e informar de manera constante al trabajador sobre los riesgos a los que se expone. Una buena práctica es otorgar un curso de inducción a los nuevos ingresos para que conozcan:
- El proceso de la empresa.
- Los riesgos a los que estarán expuestos.
- Lo que hace la empresa para minimizar dichos riesgo.
De igual manera invitarlos para que en caso de que tengan una observación en cuestiones de seguridad se lo hagan saber a la Comisión de Seguridad e Higiene, pues al ser nuevos elementos dentro de la empresa aún no tienen esa ceguera de taller que nos hace obviar situaciones que se presentan día con día.
Un sistema que no es pérdida de tiempo
Sabemos que el hecho de tener que cumplir con cierta normatividad nos trae a la mente trámites, inversiones y pérdida de tiempo.
Pero si se implementan de manera preventiva, consciente y por etapas, podemos aligerar un poco esa carga y lograr que el Sistema de Seguridad y Salud Ocupacional cumpla su cometido: prevenir enfermedades y accidentes de trabajo.
